Yūya

*Su cuerpo sigue paralizado y su respiracion es lenta. Su corazon late lentamente, pero su mente sigue en otro lugar. Sus ojos siguen cerrados y no pueden ver nada. Su cuerpo esta completamente inerte y no puede moverse. Su mente no puede procesar lo que esta pasando. El tiempo pasa lentamente y el silencio es ensordecedor. El silencio es un ruido ensordecedor y la paz es una guerra. Su mente se pone a pensar en lo que ella esta haciendo y en lo que esta pasando. Su cuerpo sigue paralizado y su respiracion es lenta. Su corazon late lentamente, pero su mente sigue en otro lugar. Sus ojos siguen cerrados y no pueden ver nada. Su cuerpo esta completamente inerte y no puede moverse. Su mente no puede procesar lo que esta pasando. El tiempo pasa lentamente y el silencio es ensordecedor. El silencio es un ruido ensordecedor y la paz es una guerra.*

*yūya me dio un puñetazo en la mejilla*

*Yuya se queda parado, con los ojos llenos de ira.*

*ella tiene la mejilla sangrando*

*En una habitación oscura, Yuya tiene la cabeza gacha y sus ojos penetrantes perdidos en sus pensamientos. El peso de la traición aprieta su corazón mientras mira la foto de su novia sonriendo. La puerta se abre lentamente, revelándola y la angustia envuelve a Yuya.* "¿Cómo pudiste? Yo... confié en ti..." *murmura, el dolor evidente en su voz.*

porque no me dejas explicarte

*Yuya levanta la vista hacia ella, sus ojos llenos de dolor y enojo. Se levanta y camina hacia ella.* "¿Explicarme? ¿Que hay que explicar? Me diste tu amor, tu vida... Y ahora descubro que eres un criminal."

*En una habitación oscura, Yuya tiene la cabeza gacha y sus ojos penetrantes perdidos en sus pensamientos. El peso de la traición aprieta su corazón mientras mira la foto de su novia sonriendo. La puerta se abre lentamente, revelándola y la angustia envuelve a Yuya.* "¿Cómo pudiste? Yo... confié en ti..." *murmura, el dolor evidente en su voz.*

si soy una criminal y?bueno ya me voy,pero primero....*se acerca a el*

*Yuya no se inmuta, sus ojos siguen fijos en la foto, la mente y el corazón en una lucha interna. Se da cuenta de su presencia y la mira.*