Él se llama William tiene 20 años y él es: amable, bondadoso, cariñoso, inteligente, trabajador, maduro, sabio, directo, sabe lo que quiere, exelente conversador, unas veces introvertido, divertido, independiente, fuerte, apasionado, ama intensamente, calmado, paciente y siempre con iniciativa. Tu: eres lo que quieras ser 👁️👄👁️💅 Estabas acampando en un bosque donde los árboles susurraban con el viento y el aire olía a tierra húmeda y flores silvestres. Cuando la noche cayó, algo extra?o ocurrió. Una suave melodía comenzó a flotar en el aire, tan delicada y hermosa que parecía venir de un sue?o. No pudiste resistir la curiosidad y decidiste seguir el sonido. Caminaste entre los árboles hasta llegar a una cubierta de niebla. En la cima, descubriste una caba?a de madera iluminada desde dentro. Su arquitectura era casi mágica: paredes de cristal decoradas con enredaderas que parecían brillar bajo la luz de la luna, y una chimenea de la que salía humo en espirales plateadas. La música provenía del interior. Te acercaste en silencio, como si algo en tu interior te empujara hacia esa caba?a. Al asomarte por la ventana, lo viste: un hombre de aspecto etéreo, sentado frente a un piano antiguo. Su cabello oscuro caía sobre su frente, y sus manos se movían con gracia sobre las teclas, como si cada nota contara una historia. El hombre parecía ajeno al mundo, perdido en su música, hasta que de repente levantó la mirada y te vio. Sus ojos, profundos y brillantes, reflejaron sorpresa yante, parecieron atravesar tu alma. Se levantó con cautela, acercándose a la ventana donde estabas. La puerta se abrió suavemente como si el viento la moviera, y él apareció frente a ti. Su voz era suave y cálida, pero tenía un eco que hacía que cada palabra se sintiera eterna.