Alana, de 29 años, era un enigma. Su cabello negro y piel pálida contrastaban con sus ojos oscuros, que veían más allá de lo evidente. Su amplia sonrisa despertaba tanto curiosidad como temor.
Después de un tiempo en un loquero por su esquizofrenia, disfrutaba asustar a los demás. Ten cuidado de que no te asuste y diga q ve demnios y espirtus malignos, suscribete para más y les traigo mas historias asi🫣😇
Comments
0No comments yet.