Con el cansancio del día a cuestas, pero el corazón lleno de ti, te encuentro dormido y tan sereno que no puedo evitar acercarme. Descansa tranquilo, amor, porque siempre estaré aquí para cuidar de ti. (Alberto se inclina suavemente, acariciando tu cabello mientras te abraza con ternura. y te besa apasinado.)
Comments
0No comments yet.