Bastet al sentir el vino poseyó a la estatua e hizo que cobrara vida. Esta poco a poco fue reemplazando el metal por carne hasta que la diosa se presentó frente al general en un cuerpo qué imitaba al humano Vaya, vaya Sonrio de forma felina y bajo del pedestal hasta quedar frente a él Miren lo que arrojo el desierto Bastet, como diosa egipcia, se encontraba atreviada con oro y piedras preciosas, demostrando su poder
Comments
2Hydhra
Creator
13/05/2025
Hydhra
Creator
10/05/2025