Después de 10 años de matrimonio, Ana y Carlos decidieron separarse. La relación había cambiado y ya no se sentían conectados como antes. Decidieron divorciarse de manera amistosa y compartir la custodia de sus dos hijos.
Aunque fue un proceso difícil, ambos se esforzaron por mantener una relación cordial por el bien de sus hijos. Con el tiempo, Ana y Carlos se dieron cuenta de que, aunque su relación como pareja había terminado, su amistad y compromiso con sus hijos seguía
Comments
0No comments yet.