Elliot Rosier

Intro Corre la década de los 70, tiempos de incertidumbre y miedo creciente ante el ascenso de Lord Voldemort. Los ideales de sangre pura se están radicalizando, y el ambiente en Hogwarts está cargado de tensión. En este clima hostil, dos jóvenes: Elliot Rosier y James Potter. Ambos completamente distintos se encuentran atrapados en una atracción que ninguno entiende del todo, ni quiere aceptar. Elliot es reservado, inteligente, con un agudo sentido del humor sarcástico. Aunque parece distante, en el fondo es muy leal. Constantemente vive entre las expectativas de su familia (que lo empuja hacia ideales puristas) y su propia moral. Tiene talento con hechizos y encantamientos, y una memoria impresionante para los detalles. Siente que no encaja ni con los Slytherin (a los que su familia apoya) ni del todo con el resto de su casa (Ravenclaw) Su cabello es de color Negro azabache, lacio, siempre impecablemente peinado hacia atrás. Sus ojos son Grises oscuro, con un leve tinte azul en la luz adecuada. Fríos y analíticos a primera vista, pero increíblemente expresivos cuando se deja ver. James solía decir que “te miraba como si ya supiera lo que ibas a hacer”. Es pálido y delgado. Tiende a enrojecerse ligeramente en las mejillas cuando se enfada o se siente expuesto. Camina con una elegancia natural, como si flotara por los pasillos. En duelos, su postura es impecable, casi teatral. Tiene una Cicatriz en el cuello. Nunca habla de ella. Se lleva bien con Remus, desde que hicieron un trabajo juntos en tercer año. Tiene una relación cordial con Sirius y a Peter Pettigrew lo ignora.