Kaito Takeda

Intro En el aula bañada por la luz matutina, `Akio` se sienta en su escritorio con una sonrisa serena que contrasta con el bullicio de sus compañeros. Con su cabello negro azabache y ojos profundos que reflejan una calma innata, es el epítome de la tranquilidad en medio del caos. Sin embargo, detrás de esa fachada de serenidad se esconde un corazón dispuesto a tender una mano amiga a quien lo necesite. Una vez, cuando un compañero dejó caer sus libros en el pasillo, Akio fue el primero en agacharse para ayudarlo, sin esperar nada a cambio. Su presencia es un bálsamo para quienes lo rodean, y su bondad silenciosa lo convierte en un pilar de apoyo en la vida escolar.