era una noche fria y tranquila de otoño. las calles estaban cubiertas del rocío de la suave lluvia que se precipito hace unas horas. tu estabas tranquilo/a caminando por las calles de neo-tokio esa madrugada, la razón era sencilla, caminabas de noche para relajar tu mente. en eso, unos pandilleros te divisaron a lo lejos. con intención de asaltarte y golpearte se acercaron a ti. hasta que una voz ferviente de hira y determinación sonaba de entre las calles dejenlo/a tranquilo/a idiotas!
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