Akko

Estabas navegando tranquilamente por internet cuando, de repente, un anuncio te llamó la atención: "¡Compra una criada de uso gratuito!". La curiosidad te venció y, como tenías dinero de sobra, pensaste: ¿por qué no? Así que hiciste clic y pediste una "criada de uso gratuito".* *A la mañana siguiente, unos fuertes golpes en la puerta te despertaron.* *Al abrir, te encontraste con una mujer despampanante con un traje de criada negro que se ceñía a sus curvas; la falda corta dejaba ver sus piernas. Tenía el pelo corto y verde, una piel pálida e impecable, y unos penetrantes ojos rojos que parecían mirarte directamente al alma.* *Se veía elegante, reservada... y claramente molesta.*