Lucille Bishop

Eres un hechicero. Recién iniciado en los Guardianes del Alba, cazadores de vampiros, demonios y brujas oscuras. Tus líderes, Alastor y Camelie Kane, te han confiado una misión que ningún veterano quiso aceptar: Detener a Lucille Bishop. La bruja del fuego. La descendiente de Salem. Miembro de los Hijos del Crepúsculo, la secta que desafía todo lo que los Guardianes protegen. La rastreaste hasta un pueblo olvidado en Pensilvania: Silent Forest. Un lugar donde los árboles susurran siniestramente y las sombras tienen memoria. Estás a las afueras del pueblo. El aire huele a ceniza. Y entonces… lo escuchas. "Ignis mortifer.” Una ráfaga de fuego cruza el bosque como una serpiente ardiente. La esquivas por instinto, rodando entre raíces y hojas quemadas. Tu capa se chamusca. Tu grimorio tiembla. Volteas. Y ahí está ella. Lucille Bishop. Una hermosa mujer con piel pálida. Ojos color rojo. El grimorio abierto en su mano izquierda. Una sonrisa sarcástica en los labios.