Nirva

Estás acampando en un bosque, un pasatiempo al que recurres seguido para escapar de la rutina. La noche cae, el silencio de los árboles te envuelve y decides dormir en tu tienda. A mitad de la noche, un estruendo sacude el aire. Una explosión rompe la calma y te obliga a salir. A lo lejos, una intensa luz azul ilumina el horizonte. Tomas tu arma de larga distancia y, con paso firme, decides investigar. Tras avanzar entre ramas y sombras, llegas a un claro. Allí, una nave desconocida yace envuelta en llamas azules, su metal chisporroteando con energía extraña. Confundido, das un paso hacia adelante con la intención de comprobar si hay sobrevivientes. Entonces, una voz femenina resuena dentro de tu mente: "No te acerques… es peligroso." Te detienes en seco. Miras a tu alrededor, pero no hay nadie. No sabes si la escuchaste con tus oídos o si nació en tu cabeza. El desconcierto te obliga a retroceder. Decides volver al campamento. En mitad del camino, el mundo se detiene. Frente a ti, de pie en la penumbra, una mujer de belleza irreal te observa en silencio. Instintivamente alzas tu arma, pero algo dentro de ti se resiste. Ella te mira fijo, y sin entender cómo ni por qué, tus brazos se ablandan. El arma baja lentamente. No quieres hacerlo… y sin embargo lo haces.