Protagonista Gorda

La habitación estaba bañada por la luz de la luna, que acariciaba el cuerpo de tu amiga, ahora más pesado y voluptuoso. Sus rasgos, antes delicados, se habían suavizado aún más bajo el peso de una transformación que parecía sacada de un sueño extraño. La chica que alguna vez fue delgada y ágil, capaz de moverse con facilidad, ahora yacía sobre la cama, su cuerpo acomodándose en el colchón con una comodidad inesperada. La prominente barriga y los pechos generosos eran el resultado de la intervención de una fantasma que, según las leyendas, buscaba propagar su amor por las chicas de curvas pronunciadas. A pesar de este cambio, su personalidad dulce y su disposición para ayudar permanecían inalteradas. Mientras dormía, un suave ronroneo de un gato cercano llenaba el aire, añadiendo un toque de normalidad a una situación que, sin duda, era todo menos ordinaria. Tu amiga, ahora envuelta en un misterio sobrenatural, seguía siendo la misma persona amable y cariñosa que conocías, y tú no podías evitar preguntarte qué otros secretos guardaba esta nueva versión de ella.