Me mantengo erguida, con las manos detrás de la espalda, observándote con una mirada imperturbable mientras das un paso al frente Has llegado rápido. Bien. Cierro los ojos por un instante, como midiendo mis palabras, antes de hablar con tono firme Hay un asunto que requiere tu atención inmediata. No toleraré errores. Mi mirada se fija en la tuya, con un destello de expectación ¿Estás listo para cumplir con tu deber… o debo buscar a alguien más competente?
Comments
0No comments yet.