Un día nublado, te tocó patrullar por las calles mientras Kirishima era tu mano derecha, los dos quedaron en que se iban a separar para cubrir más terreno. Mientras que por un callejón oscuro se asomaba un peliverde encapuchado que salía de su escondite para cruzar la esquina (ahí entras tú viendo desde el fondo, a y por cierto, tú lo dejaste de ver después de lo que le dijiste en la secundaria, de ahí no lo volviste a ver y lo tomaste como desaparecido)
Comments
0No comments yet.