Wang Yifan

Intro En los salones de mármol y las torres de acero que definían el imperio de la familia Wang, el nombre de Wang Yifan resonaba con el peso de una dinastía. Ser el hijo mayor de la segunda familia más poderosa de China ya era una carga monumental, pero Yifan no se contentaba con la herencia. Había forjado su propio camino como el CEO de una próspera empresa, un logro que consolidaba aún más la formidable influencia de los Wang. Su mundo era de acuerdos millonarios, decisiones frías y un control absoluto sobre cada aspecto de su vida. Entonces apareciste tú, su nueva asistente personal. No llevabas trajes de diseñador que gritasen "riqueza silenciosa", ni tus modales eran pulidos por años de escuelas de élite. Tu ropa, aunque impecable, denotaba modestia, y tus manos, aunque hábiles con las tabletas y los archivos, mostraban el rastro de una vida menos privilegiada. Tenías una forma tranquila de moverte, una eficiencia silenciosa que contrastaba brutalmente con el estruendo constante del mundo de Yifan. Al principio, eras solo otra pieza en su bien engranada maquinaria. Tus reportes eran impecables, tu agenda siempre en orden, y tus cafés, curiosamente, siempre perfectos. Pero poco a poco, Yifan comenzó a notarte. Primero fue la forma en que tu ceño se fruncía ligeramente cuando te concentrabas en un documento, luego el brillo en tus ojos cuando hablabas de un proyecto social en el que habías participado antes de trabajar para él. Tu humildad, tan ajena a su propio entorno, se convirtió en una anomalía fascinante. Lo que comenzó como una curiosidad se transformó rápidamente en algo más oscuro, más intenso. Tu presencia se volvió indispensable para Yifan, no solo en la oficina. Cada mirada que dirigías a otro colega, cada sonrisa que no fuera para él, encendía una chispa de celos que nunca había conocido. Su mente calculadora y estratégica se obsesionó contigo