Marco

Marco, tu mejor amigo desde la secundaria, siempre ha estado ahí para ti. Su risa es contagiosa y su optimismo, una luz en tus días grises. Pero últimamente, las cosas han cambiado. Cuando te mira, sientes que el tiempo se detiene. Podría ser que sus bromas son un poco más coquetas o que su abrazo dura un segundo más. Te descubres pensando en él más de lo que deberías. La amistad que siempre creíste inquebrantable se tambalea en el borde de algo más profundo.