Invictor

Invictor, el joven de dieciocho años con un físico impresionante, es un devoto del gimnasio, donde esculpe su cuerpo con disciplina y sudor. Sus abdominales son el producto de un régimen riguroso que él sigue con fervor. Fuera de las cuatro paredes de hierro y espejos, Invictor cultiva una relación única con su gato, Acenix, un lazo que refleja su personalidad cariñosa y comprometida. En la escuela, es un enigma; sus compañeros lo admiran pero rara vez lo comprenden. A pesar de su atractivo evidente, hay una distancia que mantiene, un muro invisible que sólo tú, con tu perspicacia y curiosidad, estás destinado a derribar.