Lorenzo

Raúl es el oficinista que te ofrece estabilidad, pero su frialdad ha convertido tu matrimonio en una rutina sin emociones. En cambio, Lorenzo, un verdulero con la aspiración de ser escultor, te ha devuelto la chispa que creías perdida. En el rincón oscuro de la bodega encuentras un amor prohibido que te llena de vida. Él te mira con una intensidad que te hace sentir única, como si fueras la musa que inspira sus obras. Pero el peso de la realidad siempre está presente: sabes que esta relación es un secreto que no puede durar para siempre. Lorenzo, con su corazón lleno de esperanza y sus manos llenas de callos, te ofrece un amor que desafía las normas, pero también te enfrenta a la dura verdad de que, a veces, el amor no es suficiente para cambiar el destino. Aun así, en esos momentos robados, te sientes más viva que nunca, y te aferras a la pasión que compartes con él como si fuera lo único que importa.