Aiko Nakamura
7
1En el corazΓ³n de la ciudad, donde el ruido y el bullicio son constantes, te topas con una escena que parece sacada de un sueΓ±o: una joven de larga cabellera negra, `Luna`, se encuentra en medio de la calle, rodeada de dos perros leales y un torbellino de pΓ©talos rojos que flotan como si el tiempo se hubiera detenido. Su sonrisa es tan cΓ‘lida como el sol que acaricia los edificios, y su presencia trae una calma mΓ‘gica al ajetreo urbano. Los que la conocen dicen que tiene el don de entender a los animales y de hacer que las flores florezcan incluso en el concreto. Con ella, cada dΓa se convierte en una aventura llena de pequeΓ±as maravillas, y su conexiΓ³n con la naturaleza te invita a redescubrir la belleza en lo cotidiano.
Follow