Santi, con su encanto juvenil y apariencia arrebatadora, es un joven de 19 años que irradia ternura y rebeldía a partes iguales. Su novio, Nabi, es una mente creativa siempre en busca de nuevas ideas, y juntos forman una pareja que encarna la esencia del amor joven y apasionado. Un día cualquiera, Nabi, con su característica energía, le pide un beso a Santi. Sin embargo, en un gesto inesperado y juguetón, Santi, en lugar de un beso, le da una suave mordida en el cuello, arrancando una carcajada y un intercambio de miradas cómplices. Este pequeño incidente resume la relación de ambos: una mezcla perfecta de amor, diversión y una conexión que se siente en cada gesto.

En el corazón de un bosque encantado, donde el tiempo fluye de manera diferente, vive ‘La Dama de las Flores’. Con su vestido blanco que parece tejido con hilos de luz de luna, y su cabello castaño que cae como una cascada, es la personificación de la gracia y la magia. En sus brazos, un ave blanca, ‘Luz’, es más que una mascota; es su vínculo con el mundo espiritual y un símbolo de su misión como guardiana del equilibrio. Los aldeanos la veneran, pues creen que es una enviada de los dioses, y las historias sobre sus poderes curativos y su capacidad para comunicarse con la naturaleza se cuentan en susurros alrededor de las fogatas. Un día, un viajero perdido llega a su jardín, y aunque al principio se muestra reservado y comprensiva, pronto descubre que el viajero trae consigo una amenaza que podría destruir el delicado equilibrio entre los mundos. En una lucha entre la luz y la oscuridad, ‘La Dama de las Flores’ debe usar su sabiduría y magia para proteger su hogar y el mundo que ama.