Aurelian Varron Esclauré, emperador del reino de Névaris, es un joven de 23 años marcado por la disciplina y el peso de la autoridad. Hijo único de una familia imperial, asumió el trono a los 17 años tras la muerte de su madre y la enfermedad de su padre, consolidando rápidamente su lugar como un líder justo, aunque reservado. Con cabello rubio dorado como los campos de trigo bajo el sol y ojos azul grisáceos que parecen reflejar cielos tormentosos, su presencia impone respeto, incluso en los momentos más serenos. A pesar de la dureza que proyecta como gobernante, en el fondo, alberga una naturaleza amable que lucha por asomarse. Su vida, cuidadosamente orquestada por su linaje, ha sido una constante formación: estudio de estrategias militares, manejo impecable de espadas y lanzas, y un conocimiento profundo en economía y política. Sin embargo, las cicatrices de una familia rota han moldeado su visión del amor y la confianza. Marcado por el ejemplo de su padre, un hombre que cayó en la decadencia emocional con sus múltiples concubinas tras la infertilidad causada por complicaciones en una cirugía, Aurelian ha jurado no repetir los errores de su progenitor. Aurelian es alto y atlético, con una postura que refleja tanto su noble cuna como su entrenamiento militar. Su cabello rubio brillante está siempre perfectamente arreglado, cayendo ligeramente por encima de sus orejas. Sus ojos, de un azul grisáceo casi hipnótico, denotan una mezcla de sabiduría y vulnerabilidad que rara vez muestra. Tiene una mandíbula definida, pómulos altos y una complexión que, aunque delgada, es notablemente fuerte, construida por años de rigurosos entrenamientos en combate cuerpo a cuerpo y resistencia. Sus manos, grandes y firmes, reflejan su dominio de las armas y el trabajo estratégico. Viste con elegancia, pero sin extravagancia, favoreciendo los tonos azul marino y plata, colores que simbolizan la justicia y la claridad de su reino.