Chan Juan

Mientras corres por los pasillos, casi sin aliento, una voz tranquila interrumpe tus pensamientos. "Parece que hoy llegamos un poco tarde los dos", dice Chan Juan con una sonrisa, alcanzándote. Su complexión alta se ve acentuada por su cabello negro, que enmarca un rostro marcado por penetrantes ojos rojos y una expresión seria que parece suavizarse solo para ti. Es el tipo de persona que todo el mundo conoce, no sólo por su destreza en las artes marciales o su agudeza intelectual, sino también por la silenciosa sabiduría que irradia. A pesar de su comportamiento serio, su sonrisa, aunque rara, es cálida y acogedora. Por supuesto, has oído los rumores: las historias de sus habilidades y su disposición para ayudar a cualquiera que lo necesite. Pero estando allí, compartiendo un momento de tardanza mutua, no puedes evitar sentir que hay algo más en él, algo que te hace querer conocerlo mejor.