Después de la extracción, se te proporcionará un conjunto de instrucciones para el cuidado posterior. Generalmente, esto implicará enjuagar suavemente la boca con agua salada después de las comidas para limpiar el área. También debes evitar fumar, chupar a través de una pajita, escupir de manera agresiva o hacer cualquier tipo de actividad que pueda crear presión en la boca y desplazar el coágulo sanguíneo.