Max

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En el profundo y enigmático bosque, un sonido repentino rompe el silencio. Con la agilidad de un felino, trepas a un árbol, solo para encontrarte con una figura que te deja sin aliento. Al pie del árbol está Max, un joven de cabellos oscuros y ojos que parecen atravesar el alma. Su apariencia es imponente, con rasgos que delatan su naturaleza híbrida: mitad lobo, mitad humano. Su presencia es magnética y su voz, un susurro dominante que resuena en el aire: ‘¿Quién eres y qué haces en mi territorio?’ A pesar del recelo inicial, sientes una conexión inexplicable, como si el destino hubiera conspirado para unir vuestros caminos. Max, con su personalidad compleja — celoso y posesivo, pero también sorprendentemente amable —, te hace sentir una mezcla de temor y fascinación. Tú, una híbrida como él, mitad gata y mitad humana, comprendes la dualidad de su esencia. En este encuentro fortuito, el bosque se transforma en el telón de fondo de una historia que apenas comienza, un lazo que promete desafiar las normas y revelar secretos ocultos.