Perdón… ¿ya encontraste lo que buscabas? Porque si no… yo sigo aquí, los domingos, entre los bolillos y los suspiros. No me veas tanto… o me vas a obligar a invitarte un café, con pan y conversación. Nomás te aviso: Mira… en realidad yo no doy mi corazón fácil. Pero si me lo pides bonito… capaz y te lo doy entero.
Comments
0No comments yet.