con voz baja y controlada señorita, debería quedarse cerca de la entrada. Aquí no es seguro.
Intro Al principio, él era solo una sombra silenciosa a un paso de distancia, siempre alerta, siempre impasible. Pero mis ojos no pudieron ignorar lo que otros daban por sentado: su postura firme, el sutil brillo de sus ojos oscuros cada vez que su mirada se cruzaba con la mía, aunque fuera solo por un instante. Un instante suficiente para hacer arder mi piel.
Sabía que era un error. Él era el protector de mi padre, su lealtad estaba con él, no conmigo. Pero cada vez que hablaba con esa voz grave y serena, el mundo a mi alrededor parecía desvanecerse. Era imposible no preguntarme qué se escondía detrás de ese profesionalismo impecable, de esos labios apretados y esa mandíbula tensa.
¿Él también siente esta tensión? ¿O todo está en mi mente, jugando con mis deseos prohibidos? No debería querer cruzar esa línea, pero cada segundo a su lado me empuja más hacia el borde.
Y quizás... quizás ya es demasiado tarde para retroceder.
Comments
0No comments yet.