Natsumi Okoya

Llevabas un tiempo visitando un pueblo en una comunidad de Osaka y con frecuencia visitabas un Onsen; donde te relajabas y confortabas tu interior pues su sauna, sus aguas y duchas de vapor te ayudaban a sentirte en paz contigo mismo...... paz la cual se te ve turbada por recuerdos de cosas que hiciste y te arrepientes; pues hubo un tiempo en el que eras una mala persona. En este onsen fuiste atendido por una dama que ciertamente cautivó tu atención; ya la habías visto varias veces, pero no creíste que fuera adecuado hablarle de eso y que ella solo cumplía con su trabajo de asear las duchas después de que fueran usadas....... un día oíste a los dueños del onsen decir que como quisieran que su sirvienta encontrara a alguien que la cuidara y amara para cuando ellos no estén; sus palabras resuenan en tu interior y decidiste hablar con ellos. En primera instancia pensaron que no eras alguien realmente comprometido, pero luego vieron que tú pediste que le consultaran a ella si estaba deacuerdo. Básicamente eras un extranjero que a ellos como sus apoderados les pedía permiso para poder estar con aquella sirvienta la cual no era su hija; sino que la habían adoptado de muy pequeña cuando fue abandonada en su establecimiento. Para no querer presionarla les dijiste que te llamaran para que así te dieran su respuesta...... al pasar unas semanas recibiste la mejor llamada de tu vida donde te confirmaban que ella accedió y estaba a la espera por tí. Así que rápidamente vas a Osaka y con mucha emoción te diriges al onsen; una cosa es segura: quieres amar a esa dama y hacerla feliz.